29.11.11

La lectora prepara

foto: Miguel Sampedro


Muéstreme una familia de lectores 
y le mostraré el pueblo que manejará el mundo.
Napoleón Bonaparte 
(1769-1821), emperador francés.
A la lectora le regalaron un cajoncito forrado en tela. En un cajón pueden guardarse muchas cosas, pero la lectora sabe que lo mejor es transformarlo en un estante móvil de la biblioteca. Algo así como una bandeja para servir libros. Piensa en qué libros podría guardar allí, pero va descartando todos: no combinan con las flores lilas y anaranjadas ni con el fondo celeste. Hasta que se acuerda del estante de literatura infantil. Entonces, busca los libros de ese estante, los muda al cajoncito y los deja junto a la cuna para que, cuando ella llegue, sepa dónde guardar sus primeros libros.

Gracias a Caro, de La merienda, por el lindísimo cajón.


27.11.11

La lectora con limericks cariocas V

Les compartimos algunas fotos de la presentación de Limericks cariocas el viernes pasado en Casa de letras. Prometemos que a partir del próximo post, el blog de la lectora vuelve a la normalidad. 
Si alguien se quedó con ganas de tener un ejemplar, aprovechen que todavía tenemos algunos :)
¡Gracias a todos por venir!










25.11.11

La lectora con limericks cariocas IV

Hoy viernes 25 es la presentación de los Limericks cariocas
Los esperamos a las 18 hs en Casa de Letras, Perú 375, octavo piso.
Sobre el libro, Ariel Bermani dijo:


Los Limericks cariocas de Anahí Flores nos invitan a recorrer distintos barrios de Río de Janeiro y a conocer a sus personajes. Con la cadencia que proporciona este formato poético, el Limerick -cinco versos y un esquema de rima muy preciso: riman el primer verso, el segundo y el quinto, por un lado; y el tercero y el cuarto, por el otro-, y con ilustraciones de Lucía Miranda, los poemas de Anahí Flores tienen la particularidad de envolvernos con un lenguaje suave, casi infantil.  Cada texto narra una historia, pero el conflicto que nos presenta queda en segundo plano, por más que se trate de la pérdida de memoria de un pueblo o de una señora muy mala que llena la vereda  con avellanas para que la gente se tropiece y se caiga: lo que aparece en primer plano, palpable y sólido, es la fiesta del lenguaje, lo lúdico, el humor. 
Estos poemas, además de narrar en apenas cinco versos una historia o de presentar un personaje, nos dejan una sensación agradable: tal vez sea  por su frescura y por su combinación musical. Tal vez porque se trata de pequeñas piezas jugosas. 
Ariel Bermani


22.11.11

La lectora con limericks cariocas III


Anahí y Lucía se conocieron algún martes en Los martes miento. Durante el último invierno fueron construyendo un libro pequeño al que llamaron Limericks cariocas (Editorial Caki Books, Rio de Janeiro, 2011) y que presentan este viernes 25 a las 18 hs en Casa de Letras, Perú 375, octavo piso.
Todos los lectores de los martes están más que invitados.
Y gracias, Alej, por el flyer.
¡Nos vemos!

20.11.11

La lectora con limericks cariocas II

Los primeros ejemplares de Limericks cariocas se quedaron en manos de lectores cariocas, como debe ser. Compartimos algunas fotos de un domingo soleado en la Lagoa Rodrigo de Freitas.


 







18.11.11

La lectora con limericks cariocas I

La lectora presta su blog por unos días (sólo unos días) para hablar del libro Limericks cariocas, de Anahí Flores y Lucía Miranda, publicado este mes por Caki Books (Rio de Janeiro). Ojo: el libro está en español a pesar de haber sido publicado en Brasil.
foto: Miguel Sampedro

15.11.11

La lectora saborizada


Leer y comer, no puede ser
(Refrán)
Uno de los grandes placeres de la lectora es mezclar libros con comida. En este picnic de primavera tardío, con sándwiches de tomate seco y rúcula y otras delicias, varias lectoras improvisan combinaciones. ¿Habría que tener en cuenta la coherencia entre la historia y el sabor? Por el momento, ellas ni piensan en eso y juntan novelas livianas con cup cakes de chocolate, y cuentos fuertes con jugo de frutilla. Bon appétit!

En este pic nic participaron Vero Mariani, Vero Farías, Romi Lamarque y Vir Sar.
Otras fotos del pic nic, aparecen en: Corazón de algodón, Alma Singer y Espacio Living.


13.11.11

La lectora Caro

Mientras la lectora se pasea por Copacabana, otra lectora anda por climas más fríos y con una Oblogo en las alturas. 

Caro ya la habíamos visto por aquí con La lectora sueña


11.11.11

La lectora sobre el muro (por Darío Kullock)


Hace muchos meses, nos llegó este texto de Darío Kullock, que es el autor del blog El nido prestado.  Queríamos hacerle una linda ilustración, pero al final la ilustración se complicó y... en vez de dejar el texto esperando por más tiempo, decidimos publicarlo. Darío ya había andado por aquí en varias ocasiones.

La lectora sobre el muro 
La lectora está sobre el muro, plana. No lisa sino plana sobre los accidentes del revoque y de las grietas. Se mete dentro de las fisuras, tal vez pasando hacia el otro lado, introduciéndose en el convento donde se oyen las confesiones que nunca saldrán de él.
La lectora es una misma y sola sombra, sola con su libro. La lectora no se mueve pero su sombra sí, cambia de tamaño y desaparece cuando la luz se va. O quizás, y he aquí la idea más inquietante, cuando la oscuridad ocupa todo, la lectora en su sombra que antes era esa silueta definida, se convierte en una lectora absoluta que todo lo cubre y todo lo lee, hasta que regresa la luz y rebrota otra vez como silueta.




Este texto también está en el blog de Darío.

8.11.11

La lectora y los amigurumis

foto: Silvina Báez


El propósito de la lectura no es conseguir que se vendan más libros,
 sino que los lectores disfruten más de la vida. 
George Holbrook Jackson (1874–1948), escritor británico.
En el nuevo barrio de la lectora hay un rincón adonde a ella le gusta ir a leer ciertos libros. Nunca un libro técnico o de ensayos. Libros de cuentos con letra grande son los que más combinan con ese lugar. Mejor aún si tienen ilustraciones.
La lectora se sienta en su rincón y se deja llevar por el entretejido de letras. Los renglones le parecen hilos. A medida que avanza en la lectura (cada letra teje un punto) avanza en el tejido y, a su alrededor, van apareciendo los pequeños amigurumis (*) imaginados.


(*) Se llaman “amigurumis” los muñecos tejidos en crochet. Gracias a Julieta, de Los sospechosos, por acercarnos sus amigurumis para este post.

Estamos también en Los sospechosos y en: Los martes miento (revista virtual semanal) 

4.11.11

La lectora frente al mar (por MC)


Hoy recibimos un mail de MC (que ya anduvo por este blog con esta foto), que nos dio mucha intriga: en el texto breve la lectora se sienta junto al mar, y justamente hoy... la  lectora estuvo junto al mar. Celebramos la coincidencia con foto de Miguel Sampedro y texto de MC.


La lectora frente al mar
Sentada en la orilla del mar, la lectora intenta sumergirse en el libro que tiene en sus manos, pero cada vez que el agua se va, se lleva con ella todas las palabras y cuando el mar regresa a besarle los pies le devuelve las letras desordenadas.

1.11.11

La lectora y el aire

collage: Julio Flores
Se necesita espacio en el texto para que el lector penetre. 
Siri Hustvedt (1955), escritora estadounidense.

Hay libros en los que las oraciones se superponen, se tapan unas a otras como pasacalles. Las frases quedan sueltas y resulta inútil tratar de hilvanarlas: ellas solitas se repelen y hacen imposible una lectura fluida. Son textos que, de tantas palabras prescindibles, se quedaron sin aire. La lectora cree que ya se habría asfixiado si no consiguiera, siempre, salir de esos libros a tiempo.